La colección de rocas con apariencia de animales en el planeta rojo acaba de recibir un nuevo miembro.
El rover Curiosity de la NASA ha
estado en una misión de exploración de Marte desde su aterrizaje en el planeta
rojo en 2012 y no solo ha capturado impresionantes instantáneas del planeta
estéril, sino que también ha descubierto los posibles signos de que la vida
puede haber existido en el planeta.
Aun así, no todo es trabajo serio
para el solitario rover. Y es que, entre quienes les gusta adentrarse en todas
las imágenes que pone la NASA a disposición del público, se afianza cada vez
más el juego de la pareidolia.
Este concepto describe la
tendencia humana a detectar objetos familiares con formas aleatorias, como
cuando vemos caras en los enchufes, por ejemplo.
Así, ahora podemos dar la
bienvenida –aunque todavía no hemos ni siquiera encontrados microbios en Marte–
a una roca con forma de pato, que se suma a los hallazgos anteriores de un pez,
un gato, un remolino de espaguetis y hasta una puerta secreta.
La nueva imagen de la “pareidolia
marciana”, captada en el 22 de octubre de 2022, ha sido popularizada por Andrea
Luck, quien creó una versión coloreada de la roca y compartió la divertida
formación en Twitter esta semana.
La ciencia detrás del “pato”
descubierto por el rover Curiosity
En la actualidad, Curiosity está
explorando el Monte Sharp, la enorme montaña que forma un pico central en medio
del cráter Gale.
Según un blog de la NASA, los
científicos creen que esta región albergó arroyos y estanques en Marte hace
miles de millones de años, que se secaron y dejaron minerales y depósitos de
barro.
Según explica IFL Science, estos
se convirtieron en capas de piedra, erosionadas durante miles de millones de
años por los vientos y las tormentas de polvo del planeta. Algo que ha dado
lugar a rasgos geológicos de aspecto muy extraño. Como en esta ocasión, en
forma de pato.
Este caso recuerda también a
otros similares fuera de Marte, como el viejo “cubo lunar” o la “cabaña
alienígena” que detectó el rover Yutu 2 de China, el cual, tras una
investigación más profunda, resultó ser no más que otra roca.
El Curiosity ha pasado 3.647
soles –días marcianos– en el planeta rojo y sigue funcionando.
Fuentes: Publicado por Sara Jerez - La información es de Deutsche Welle - biobiochile