¿PORTENTOSAS NAVES VOLADORAS QUE ESTABAN AL
SERVICIO DE LOS DIOSES HACE MILES DE AÑOS?
El ministerio de
defensa de la India ha pedido a los investigadores de su país estudiar los
textos sagrados… Porque describen portentosas naves y armas que podrían
reproducirse en la actualidad.
Según detallan los
textos sánscritos y sagrados de la antigua India:
“Venía a bordo de un
vimana, y sació su ira enviando un sólo y único rayo en contra de la ciudad.
Una enorme columna de fuego diez mil veces más luminosa que el sol se levantó,
y la ciudad quedó reducida a cenizas en el acto.” – Mahabharata
“Las Vimanas tienen
la forma de una esfera y navegaban por los aires a causa del mercurio (rasa)
levantando un fuerte viento. Hombres a bordo de los Vimanas podían así cubrir
grandes distancias en un espacio de tiempo sorprendentemente corto, pues el
hombre que conducía lo hacia a su voluntad volando de abajo arriba, de arriba
abajo, adelante o atrás.” – Ramayana
“Debe haber cuatro
depósitos de mercurio (rasa) en su interior. Cuando son calentados por medio de
un fuego controlado, el vimana desarrolla un poder de trueno por medio del
mercurio. Si este motor de hierro, con uniones adecuadamente soldadas, es
llenado de mercurio y el fuego se dirige hacia la parte superior, desarrolla
una gran potencia, con el rugido de un león e inmediatamente se convierte en
una perla en el cielo.” – Ramayana
“Era capaz de
moverse sobre el agua y bajo el agua. Podía volar tan alto y veloz que resultaba
imposible de ver. Aunque estuviese oscuro, el piloto podía conducirlo en la
oscuridad”. - Libro de Krishna, cap. 15
“Fuerte y durable
debe ser hecho el cuerpo, como un gran pájaro volador, de material ligero.
Dentro de él debe uno poner el motor de mercurio con su aparato calefactor de
hierro por debajo. Por medio del poder latente en el mercurio que pone el
impulsor del torbellino en movimiento, un hombre que se siente adentro puede
viajar una gran distancia en el cielo de la manera más maravillosa”. - Samarangana Sutradhara, antiguo texto hindú
“Estaban hechos con
planchas de hierro bien unidas y lisas y eran tan veloces que casi no se los
podía ver desde el suelo. Los hombres de la tierra podían elevarse muy alto en
los cielos y los hombres de los cielos podían bajar a la tierra”. - Samarangana
Sutradhara
“A lo largo de la
historia han habido muchos mitos y leyendas sobre máquinas o artefactos
voladores”, escribe el americano David H. Childress, autor de más de 15 libros
sobre ufología y civilizaciones desaparecidas. “Las conocidas alfombras voladoras
de la antigua Arabia; figuras Bíblicas tales como Ezequiel y Salomón volando de
lugar en lugar; y los carros mágicos, o Vímanas, de la India antigua y China”.
Según el autor de
Technology of the Gods (Tecnología de los Dioses), los textos sagrados hindúes
retratan a la perfección una era en la que máquinas voladoras surcaban los
cielos de la Tierra de manera más que frecuente. Las Vímanas, conocidas
popularmente como “Carros de los Dioses” en el círculo esotérico, transportaron
a nobles y funcionarios a distancias espectaculares y en tiempos irreales. A
veces emitiendo un rugido ensordecedor, a veces un zumbido melodioso.
En total, cientos y
cientos de páginas de más de una veintena de libros hindúes antiguos relatan
cómo eran construidas las misteriosas naves, cómo funcionaban, cómo debían ser
manejadas y cuál era el desempeño de las mismas, según fueran tiempos de paz o
de guerra.
“Los antiguos textos
indios sobre Vímanas son tan numerosos que harían falta varios libros para
relatar lo que ellos tienen para decir”, dice Childress. “Los mismos indios
antiguos escribieron manuales enteros de vuelo al mando de varios tipos de
Vímanas”.
“En este libro se
describen, en 8 elocuentes y cautivadores capítulos…” dice asimismo el antiguo
político y técnico Bharadwaja en su obra Vaimanika Sastra, “las artes de
fabricación de varios tipos de aeroplanos de suave y confortable viaje en el
cielo, como una fuerza unificadora del Universo, que contribuye al bienestar de
la humanidad”.
De acuerdo a los
viejos textos, según la estructura y función de los vímanas, estas podían
dividirse en cuatro clases principales (rukma, tripura, sakuna y sundara) y en
113 subclases. De acuerdo a lo descripto, algunos parecían ser tan sencillas
como un trono volador unipersonal, y otras tan grandes como para poseer siete
niveles de altura.
Además, los
documentos antiguos afirman celar los secretos para la creación de aeroplanos
indestructibles, de aviones invisibles, la escucha de sonidos y la captación de
imágenes en el interior de aviones enemigos, sistemas de detección y
destrucción de naves enemigas y tácticas para lograr la pérdida de conocimiento
de pilotos rivales.
“…Con esos métodos
se puede construir una Vímana grande como un templo”, dice el Ramayana. “Debe
haber cuatro depósitos de mercurio en su interior. Cuando se calientan por
medio de un fuego controlado, la vímana desarrolla un poder de trueno por medio
del mercurio. Si este motor de hierro, con uniones adecuadamente soldadas, se
llena de mercurio y el fuego se dirige hacia la parte superior, desarrolla una
gran potencia, con el rugido de un león, e inmediatamente se convierte en una
perla en el cielo”.
De igual modo, en
otros textos como el Samarangana Sutradhara pueden hallarse desde velocidades,
detalles técnicos y diseños de Vímanas, hasta formas de maniobra y el uso
correcto del combustible.
El Imperio de Rama
Acerca de la
ubicación temporal de la era de las Vímanas, investigadores como el Dr.
Kunwarlal Jain Vyas sostienen que las epopeyas bélicas relatadas en los textos
antiguos hindúes hablan de un periodo conocido como el Imperio de Rama, tan
lejano como 26.000 años en el pasado.
Cuestionada
fuertemente por los teóricos convencionales, la hipótesis del Imperio de Rama
es defendida con documentación histórica y física por especialistas en el
estudio de civilizaciones prehistóricas tecnológicamente desarrolladas.
Según investigadores
como Brad Steiger, las vímanas no fueron lo único que deslumbró los cielos de
la India en un pasado remoto. Una explosión nuclear acontecida hace 5.000 años
borró a todos sus habitantes de la faz de la Tierra, dejando ciudades como
Mohenjo Daro en el Valle del Río Indo totalmente cristalizadas.
Sin embargo, no solo
los textos hindúes nombran a las Vímanas, sino que muchas de las escrituras del
oriente antiguo mencionan naves poderosas capaces de surcar, incluso, las
estrellas.
El Canchur, un libro
milenario tibetano del cual fue descifrado un porcentaje mínimo, también abunda
en menciones de naves como burbujas o perlas espaciales capaces de transportar
gente a grandes velocidades.
La Epopeya de
Gilgamesh, anterior a las escrituras bíblicas y conocida por su similitud con
varios pasajes de la misma, hace referencia a una experiencia a bordo de un
vehículo de bronce desde el cual la Tierra se veía como “una pasta de harina, y
el mar como un pilón de agua”.
Incluso en la
historia de la antigua China es conocido un episodio en el que un príncipe
llamado Wan Hu, quien vivió en el siglo XV a.C., se elevó por los aires en un
asiento de 47 cohetes para no ser visto nunca más.
Fuente: la granepoca.com

