AVISTAMIENTO DE OVNI PURO Y OTRO CON EFECTOS ALEATORIOS
La historia ufológica desde los más remotos tiempos ha incluido testimonios de “puros voladores” en nuestros cielos, es así que historiadores y recopiladores de casos anómalos han dejado testimonios escritos sobre estos extraños relatos. La muestra es la imagen que incluimos, y que está en el libro titulado Prodigiorum Ac Ostentorum Chronicon por Conrad Lycosthenes (1518-1561) El dibujo representa a un avistamiento de un OVNI alargado en Arabia en 1479. El libro se encuentra en la Biblioteca del Museo Australiano de Investigación y que llamó la atención a la población que vio este “prodigio” como se le denomina en su registro.
¿Pero hay testimonios actuales? Todo indica que el enigma continúa y que las personas guardan dentro de sí estas experiencias, salvo excepciones como ha ocurrido en este caso inédito que les presentamos:
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Según declaró la señora Malvina Ulloa Roa, 58 años, casada, estudios medios, labores de casa, domiciliada en calle Las Rosas, en el mes de diciembre del año 1986 alrededor de las 21:30 horas y en ese entonces domiciliada en Villa Los Jardines de Angol, se encontraba lavando ropa en el patio de su casa, sola. El cielo estaba despejado y muy estrellado, en un momento dado, la ampolleta del patio que estaba en frente de ella comenzó a bajar el voltaje, al igual que todas las ampolletas del interior de la casa, también la lavadora redujo al mínimo su funcionamiento. Ante algo tan extraño, comenzó a escuchar en lo alto un sonido como de globo que se desinflaba y al mirar hacia arriba, pudo ver un enorme cuerpo ovalado, oscuro, a baja altura. Según su apreciación personal, calculo unos 40 a 50 metros de largo. Su desplazamiento era lento.
La Sra. Malvina dice haber quedado paralizada con lo que observaba. Describe un “puro” gigantesco, de extremos redondeados, como un zeppelín de los antiguos, por compararlo con algo. No llevaba luz alguna encendida, pero lo vio suficiente bien contraponiendo las estrellas visibles en ese momento. No pudo calcular en forma precisa la altura de lo que observaba pero estimo no más de 200 metros y su dirección era de sur a norte No pudo definir a qué altura iba, pero estimo que no más de los 200 metros, su dirección era de sur a norte.
Tras unos 15 segundos aproximadamente pudo sacar la voz, llamo a su esposo Eduardo Martin Godoy, hoy en la actualidad de 60 años, estudios medios, transportista, que estaba al interior y que alarmado salió al patio. El Sr. Martín alcanzo a ver aquel cuerpo oscuro cuando ya se alejaba sin variaciones. Igual alcanzó a verlo una vecina que salió a mis gritos a su patio, y la cual quedó muy nerviosa ante ese fenómeno.
Al día siguiente la prensa escrita y radial comunicó este hecho, que había causado seria alarma en Puerto Saavedra y varias ciudades más hacia el norte.
Por último añade que cuando el aparato se hubo alejado unas dos cuadras, la potencia de las ampolletas tornó a su normalidad, igual que su máquina lavadora de ropa.
La familia aludida más arriba quien ofreció su testimonio en exclusiva a nuestra colaborador Raúl Gajardo Leopold, al ser consultados sobre su vida posterior a este extraño suceso que ocurrió en 1986 añadieron que la semana recién pasada, o sea, el día jueves 2 de agosto en curso, alrededor de las 21:00 horas, estando en el comedor de su casa Doña Malvina tomando un café después de cenar, y estando su esposo Eduardo en el dormitorio viendo las noticias por la TV., comenzaron a sonar sus dos celulares que poseen, además un juguete del nieto que tiene 9 meses también comenzó a funcionar haciendo sonar su campanilla. Su marido en el dormitorio noto que la pantalla de su televisor dio un fuerte golpe de luz un par de veces y continuó funcionando normal. Don Eduardo vino de inmediato al comedor, justo en los momentos en que un fuerte viento pasó a lo largo de la casa, de oeste a este, en circunstancias que todas las ventanas del inmueble estaban cerradas. El matrimonio no atino a salir al patio. Tampoco escucharon ruido extraño alguno. La ampolleta del comedor también dio un fulgor extra. No ocurrió nada más y luego recobraron la calma.
Según nuestro corresponsal este fenómeno se debió al paso de un Ovni a baja altitud y que produjo un resultado anormal de electromagnetismo.
Consultadas otros opiniones, mencionan que la segunda experiencia relatada por este matrimonio puede encasillarse más dentro de una fenomenología paranormal diferente a la ufológica, aunque para poder definirla en forma más concreta habría que hacer un estudio más profundo del lugar donde ocurrió esta segunda experiencia, incluyendo a la propio testigo. Donde sí existe unanimidad de opiniones es en la primera experiencia que esta totalmente dentro del campo ufológico.
Fuente Original: Raúl Gajardo Leopold
Angol 29 de Agosto de 2012
